HOLA AMIG@

Amigo de las letras y de los sones que ellas encierran, agradezco tu presencia en esta sinfonía de palabras, que sólo enmudecen para escuchar tu silencio. El precioso silencio de quien disfruta de la lectura. Te dejo mis versos y mis cuentos, para que vayas despacio, hacia tu propio encuentro.

sábado, 27 de agosto de 2011

Ella


Noche,
sorbo de sombras,
                      silencio
                            misterio
                                  nada.

Fuga en diminutas lunas,
                           cabizbajo
                               doliente
con dolor de pesadumbre.

Oh! Noche,
            abre tus fauces
                  vomita mi estrella,
quiero verla
                palparla
                             oírla
                                    beberla.


A ella, sólo a ella, la más bella.

Eduardo Albarracín

jueves, 18 de agosto de 2011

Visiones


El señor Cubero fue a visitar al oculista porque tenía problemas en el ojo.
El especialista, después de revisarlo, le dijo que lo suyo pasaba por otro lado, que era mejor consultara con un cardiólogo.
Cubero se quedó sorprendido, pero escuchó las sugerencias, por lo que fue a ver al médico.
El cardiólogo auscultó a Cubero, y le recomendó que se presentara  al  Sacerdote del Templo, pues el problema que detectaba era que tenía el corazón contrito.
Más confundido que preocupado, Cubero se dirigió al sacerdote para exponerle su problema, y este, después de escucharlo con minuciosa  atención, le dio el diagnóstico definitivo: El problema de Cubero era que tenía la paja del ojo ajeno.

Eduardo Albarracín

lunes, 15 de agosto de 2011

Preces

La tarde desgrana silenciosa las últimas preces de su oración politeísta. A cada dios le llegan las cuitas de sus fieles. Hay quienes seguros esperan, hay quienes desconfían y hay otros que sencillamente no creen. El único y veradero Dios escucha a todos (al fin y al cabo son sus hijos), incluso a aquel que palanifica un crímen. Pero de algo debe el hombre estar seguro: Para Dios la muerte no existe.
Eduardo Albarracín

domingo, 14 de agosto de 2011

Más allá, más acá


Con los ojos deseosos de verte,
trepo a horcajadas sobre las nubes
doradas del poniente,
en un raptus de melancólica búsqueda
con la esperanza de encontrarte…
Más allá del horizonte, más acá del sol.




jueves, 4 de agosto de 2011

Vino sin Ti



Siento el murmullo de la sangre
corriendo por tus uvas,
y en la boca el  fluir del vino
que arrastra suave el aroma de la tierra;
aplacando la penumbra
de mis horas mustias.
Vino que bebo, despacio de tu boca
añeja  de lunas cautivas,
que embelesaron mis noches
en la pesada desazón de tu olvido.
Vino que bebo, adornado de luces,
en la fina orilla de esta copa encendida;
que me embriaga en su fuego, de rosas y locura.
Vino sin ti, vino de cruel amargura.

Eduardo Albarracín


miércoles, 3 de agosto de 2011

Sánate


Ve por la tristeza que tienes guardada
y échala al fuego para que arda.
En el intenso carmesí de las llamas,
imagínate el despuntar del alba
y en el celeste brumoso que emana
del fuego su flama,
imagínate el cielo extendido frente a tu mirada.
Sólo esa basta,
para  tener  el cielo en tu mirada
y un nuevo día acariciándote el alma.
Sánate
encuentra en el calor del fuego
la tibieza de las manos que amas,
el grito apagado del amor que te llama
y el eco de esa voz querida que aún te suena lejana.
Sánate
que más allá de los solitarios momentos
que la rutina entreteje en lágrimas,
hay un voz que discurre en la eternidad de tu alma
y es el  mandato de Dios que te dice…
Sánate.
Que tú puedes lograr esa preciosa hazaña.

Eduardo Albarracin