hecho de sorbos invariables,
de dosis efímeras,
y de impiadosas realidades;
es un mundo donde abrevan
sin claudicar los recuerdos,
para inyectarme de momentos
que confrontan con el ahora.
Este mundo mío…
carga en sus alforjas
las piedras del camino,
para ablandarlas en las horas
en que mana de la pluma el poema;
y las vuelve sutil y ligeras,
encalladas en las entrañas
de un territorio irredento y vacilante,
capaz de trastocar el fuego
en bálsamo sanador de cicatrices.
Este mundo mío…
tiene en la redondez de sus orillas,
la capacidad de darle una vuelta más
a la oscura razón de sus designios,
y en la suave cascada de sus secretos,
descubrir que la mañana
dejó las llaves olvidadas al lado mío.
Súbete si quieres, demos unas vueltas,
que ser loco es parte de la cordura.
Es un mundo muy tuyo que habla de algo que pasó ,algo presente y tal vez algo que aparecerá.
ResponderEliminarAsí ndamos amigo.queriendo que todo salga bien,aunque a veces nos quedamos
con el deseo nomás.
Todo se logra si ponemos más energía ,aunque nos rodeemos de muchos que no entienden...
eduardo
ResponderEliminarbello!
este mundo nuestro tiene todo lo que contiene el poema
me gusta como lo decís
saludos de quilmes
Gracias mabel.
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